Sevilla en un domingo: desde la Plaza de España hasta Triana

Plaza de España

Luego de caminar un rato por Sevilla, llegamos a la Plaza de España. Este lugar, creado específicamente para una feria universal realizada en la década de 1920 como una alegoría  arquitectónica y paisajística donde se representaba toda  España como una unidad -claro, Euskadi es llamado Vascongadas y Cataluña todavía era parte incuestionable del país-.

Ejemplo de lo anterior son los conjuntos de baldosas que representan a todas las provincias españolas ya que no existían las comunidades autónomas, con su escudo y su nombre en idioma castellano. Más allá de su connotación españolista (ojo no juzguemos con la mirada del 2017 productos culturales de hace casi un siglo), son verdaderas obras de arte que merecen ser vistas con calma.

Jaén en la Plaza de España

En la actualidad, la Plaza de España es conocida a nivel global por ser una de las principales escenografías externas donde se ha filmado la serie de HBO “Games of Thrones” (Juego de Tronos en España), siendo esta uno de los palacios donde se desarrollaban las aventuras y desventuras de Jon Snow (Jon Nieve en estos pagos, clásica traducción literal herencia del franquismo, pero eso excede a este blog) y otros personajes de la misma saga pseudomedieval. Esto ha hecho que se haya puesto de moda entre los seguidores de esta serie, siendo un porcentaje no despreciable de quienes la visitan (acá no me incluyo)

Pasillo en la Plaza de España

Más allá de esta alegoría ñoña a la serie de Jon Nieve, nos encontramos con que el complejo de Plaza de España se encuentra  en algunas partes, algo abandonado, desvencijado y mal trecho, es decir,  le han dado mucho uso como locación pero poca inversión o interés  para mantenerlo en su totalidad. Pero eso sí, no seamos injustos, la Plaza de España aún mantiene bastante su encanto. Si al menos un cuidado le dieran a la parte externa sería una mejor atracción para cualquiera que venga a Sevilla, pero la visita indiscriminada lo tiene a mal traer, sucio (sobretodo las fuentes) y con alguna de las baldosas perdidas o sueltas. No digo que esté a punto de caerse ni mucho menos, pero claro que podría estar mejor de lo que se encuentra.

Vista del complejo de la Plaza de España

Dejamos la Plaza de España para dirigirnos en dirección al río Guadalviquir cruzando el parque de María Luisa para llegar a la costanera, ya que teníamos como objetivo dirigirnos hacia el puente y barrio de Triana.  Como no teníamos ningún apuro nos fuimos caminando por una costanera llena de chiringuitos (bares al paso) pero como era domingo, muchos estaban cerrados o funcionando  a media máquina. Pero más allá de eso, caminar por la costanera te permite hacerte una mejor idea de como es esta ciudad, ya que por la costanera se bordea el centro histórico. Luego de caminar un rato, se llega a la altura de la Plaza de Toros La Maestranza, lugar que no nos generó un gran atractivo por conocer dado que no soy un amigo de la tauromaquia (personalmente pienso es algo barbarico) pero para quienes quieran conocer posee un museo que es una buena opción para conocer sobre dicho "arte". Unos pocos pasos por allá, se encuentra el legendario puente de Triana, pero lo que sigue ya es otra historia.

Vista del río Guadalviquir y del barrio de Triana desde el puente

Tips:

Ir a la Plaza de España es gratuito, pero recomendable ir de día ya que de noche la zona es algo abandonada.

Sevilla es una ciudad totalmente caminable, salvo si vas fuera del centro donde si es necesario transporte público. Desde la Plaza de España hasta el Puente de Triana no son más de 2 kilómetros, los cuales se pueden caminar sin mayores problemas.

Los chiringuitos (bares) a la orilla del Guadalviquir son buena opción para tomar algo durante la feria de abril, semana santa y verano