vendedoras en la Feria 16 de Julio de El Alto |
En todas las veces que fui a La Paz, siempre me quedó pendiente visitar la Feria 16 de Julio en El Alto. Pero esta vez iba a hacerlo.
¿Porqué tanto interés en conocer la Feria 16 de Julio de El Alto? Simplemente por ser esta una de las ferias al aire libre más grandes, no sólo de Bolivia sino que de toda Sudamérica. Sólo por eso y por haber sido un asiduo visitantes de ferias populares (feria de los cachureos como se llamaba a la que iba cuando niño en el sector de Santa Julia en Viña del Mar) siempre me han generado curiosidad esta clase de espacios de comercio popular, lo cual era ya suficiente motivo para ir a la Feria de El Alto.
Antes de seguir, debo contextualizar esta visita. En el último tiempo estuve 2 veces en La Paz, la primera fue la que conté no hace mucho en un posteo y la segunda, la cual fue un viaje más de trabajo (donde se vienen varios posteos más sobre Bolivia) en esta última se dió el espacio para visitarla, que fue un día domingo. Me levanté temprano, salí en dirección al Cementerio -desde donde salen los micros a Tiahuanaco y Copacabana- para luego enfilar hacia la antigua Estación Central de Trenes, hoy estación del Teleférico y centro cultural. Desde este punto tomo la Línea Roja del Teleférico (3 estaciones).
Boletería del Teleférico, Estación Central, La Paz |
Pensé, día domingo, tranquilo, poca gente en el teleférico paceño. No caballero, había fila para tomarlo, ya que la gran mayoría de la genta iba hacia la Fería del Alto a estirar el mango (dinero), ya que supuestamente puedes encontrar de todo a buen precio. En esos días, conocí gente perteneciente a la burocracia boliviana que me decía que en la Feria de El Alto está todo muy barato y que incluso ellos, siendo de buenos ingresos, iban a comprar allí.
Volviendo al relato, hago la fila, ya que iba sin apuro, entro a uno de los carros del Teleférico y en menos de 10 minutos ya me encontraba en la estación final de la Línea Roja, 16 de Julio/Jacha Q'hatu, donde literalmente sales de ella y te encuentras con la Feria 16 de Julio.
Feria 16 de Julio, El Alto, La Paz |
Acá no te vas a encontrar con un pasillo largo sino que con varios, lo que hacía que recorrerla toda había que dedicarle bastante tiempo y obviamente visitarla sin apuro.
Comienzo a caminarla y si es cierto hay de todo: es tanto una feria de antiguedades, chucherías, libros, ropa, herramientas varias, piezas de automovil, celulares, platos, menaje, vajilla, cocinerias o puestos de comida, mercado agrícola y carnicería al aire libre, como también mercadería de contrabando, mayormente desde la Argentina, Perú, Brasil y Chile.
En otras palabras, puedes encontrar prácticamente de todo, ya que esta feria funge como el abastecedor minorista para los sectores populares y medios tanto de El Alto como de La Paz.
Caminar por los pasillos de la Feria 16 de Julio de El Alto es simplemente sumergirse en el mundo popular urbano tanto del El Alto como La Paz, una mixtura entre la tradición aimara rural y la urbana, tanto la de viejo cuño colonial-republicana de La Paz como el de la explosión urbana de El Alto, una ciudad de migrantes rurales que tienen su apogeo en esta Feria.
Cocinería en la Feria 16 de Julio, El Alto |
Por momentos da la sensación de que la Feria 16 de Julio no se termina nunca, ya que caminas cuadras y cuadras y no le ves un fin. Pero después de unas 10 cuadras aproximadamente se termina, casi de maner abrupta y me devolví hacia el otro lado, hacia dirección a la Estación del Teleférico y a la Autopista a La Paz.
Feria sin fin |
Camino sin mayor prisa hasta la zona donde pasa la Autopista a La Paz (lugar de parada de combis durante todo el día), que es en cierta medida marca el límite de la Feria 16 de Julio, aunque es cierto que sigue habiendo puestos de comercio informal, ya no tiene la misma dinámica de la Feria, siendo en la práctica el fin de la misma.
Autopista El Alto a La Paz |
Vista de La Paz desde la Feria 16 de Julio |
👉¿Es segura para los viajeros y turistas? Sólo hay que aplicar el sentido común para visitarla: nada de ostentar teléfonos móviles, dinero y elementos caros. La cara de turista se nota a kilómetros. Por eso, ojo sin volverse paranoico.
Debe ser toda una experiencia vivir La Feria en La Paz, gracias por acercarlo a los que estamos tan lejos y darnos la oportunidad de conocerlo. Saludos!
ResponderBorrarMe ha recordado mucho al Rastro de Madrid, con sus diferencias, claro, pero tiene pinta de ser de esos sitios en los que pasas muchas horas y en los que puedes encontrar verdaderas "joyitas". ¡¡Gracias por enseñárnoslo!!
ResponderBorrarMe encanta tu relato, veo que visitar la feria del Alto es una buenísima manera de conectar con el ambiente más local. Me encantaría ir
ResponderBorrarNos encantan los mercados, siempre descubres puestos curiosos. Saludos!!
ResponderBorrarDesaando conocerla, me encantan estos mercados y esta además considerada una de las ferias al aire libre más grandes de Sudamérica, la Feria 16 de Julio es un auténtico espectáculo de colores, aromas y sonidos. Este enorme mercado refleja la vibrante cultura boliviana y su espíritu de comercio popular
ResponderBorrar